La Virgen estrena un delantal durante la Pascua

El pasado Sábado Santo las Camareras de la Virgen ataviaron a nuestra patrona para la Pascua de Resurrección. Tal y como rige en la Liturgia de la Iglesia durante este tiempo pascual el color usado es el blanco. Con este color ha sido ataviada nuestra bendita Madre.

La novedad en este atavío es la recuperación histórica de un delantal. El delantal con el que ha sido vestida la Sagrada Imagen es una copia de uno antiguo que estaba en muy mal estado. Esta nueva pieza ha sido confeccionada por las Camareras, siendo el tejido donado por un congregante y los encajes de plata entrefina los que se disponían en el anterior delantal.

En esta ocasión el manto que luce la Virgen es el conocido como “Manila” ya que se trata de una pieza de seda blanca bordada en la misma técnica que los mantones de manila. Se adorna con distintos encajes de plata y un entredós de origen francés. Está datado en el último tercio del siglo XVIII.  

También en este cambio las Camareras han recuperado un antiguo velo que se encontraba en desuso. El velo es una gasa de seda con hilos de plata entre tejidos y adornado con un encaje del mismo metal.

Un estampa única la que vivimos esta Pascua en la Ermita de la Virgen, donde las Camareras con gran acierto han recreado las vestimentas usadas por nuestra patrona en el siglo XIX.